Tras el éxito de su novela Nunca faltaron flores (editorial Niebla,2018), Carmelo Rufo nos presenta su segundo relato. Aunqueindependiente de la primera narración, enlaza con aquella en ciertosaspectos de la trama, como es la aparición de ELLA, la abuela(bisabuela) Julia, protagonista del primer libro que tendrá un papeldestacado en este segundo, o de Santiago, hijo de Julia y abuelo delniño, también presente en ambas novelas; así como el tinte debiografía familiar que en ambos libros comprobamos. También coincidenambos escritos en la naturalidad narrativa y la vivacidad del relato,ello gracias a la agilidad en los diálogos.