A Poppy le encantan las películas de terror; a su amigo Quico, no. Poppy no puede esperar más para probar la montaña rusa; Quico no tiene ninguna prisa. A pesar de eso, son grandes amigos. Así que cuando la feria de atracciones llega a la ciudad, Quico accede a ir con ella, aunque eso le obligue a probar algunas cosas por primera vez. Una irresistible pareja que, pese a sus caracteres opuestos, disfruta de su amistad y afronta la vida con humor y camaradería.