Conmovedora, elocuente, a veces impactante, esta historia ofrece al lector la experiencia real de quien ha sufrido un trastorno alimenticio. Completada con otras experiencias de jovencitas que lo han sufrido, la autora nos ofrece una historia novelada de su propia y de otras vidas. Éste es el relato de algunos relatos, una ficción en la vida de algunas vidas. Que, como la de la autora, son testimonio de un sufrimiento solitario y también de un incesante deseo por encontrar paz y tranquilidad. Una alerta, un llamado de atención a papás, maestros, familiares, amigos; esta obra es un aviso a tiempo que generosamente ofrece una jovencita. Narrada con limpieza, con sencillez, desentraña un problema de nuestro tiempo, al que sin saberlo, tal vez estemos contribuyendo.