Búsqueda de Editorial : ANTONIO MACHADO / Colección : PECADOS CAPITALES

6 resultados

  • LUJURIA, LA
    GIORELLO, GIULIO
    Sade, a finales del siglo XVIII, juzga de hipócritas a los cristianos que califican a la lujuria de delito. Se podrá estar o no de acuerdo con la afirmación del famoso Marqués, pero esa fuerza desbordante de la naturaleza que es la lujuria es algo más que un vicio. El presente libro tiene como cómplices de la lujuria a personajes de lo más inesperados: Mozart, Dante, Shakespear...
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  • SOBERBIA, LA
    BAZZICALUPO, LAURA
    La soberbia es la raíz y la reina de todos los pecados, así la definen tanto Agustín como Tomás. En un momento como el que hoy atraviesa el mundo occidental contemporáneo, construido e inspirado por el presupuesto igualitario de los derechos, la soberbia ...
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  • PEREZA PASIÓN POR LA INDIFERENCIA, LA
    BENVENUTO, SERGIO
    La pereza es culpable de males como la tristeza, la desesperación, la ansiedad, la indiferencia, el aburrimiento o la depresión. Si bien en la visión religiosa comenzó siendo un pecado capital, hoy día, en su visión laica y moderna, se ha trasformado en u ...
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  • LA GULA
    RIGOTTI, FRANCESCA
    EL PECADO DE«CARNAL», ENENVIDIA Y LACORPOREIDAD EN LAS SENSREQUIERE DEL(EL VIENTRE,TRANSFIERE DPERSONA...EL CAR CTERSUFRIDO A LOENFERMEDAD,DE LOS RICOSTENDENCIA SO LA GULA DES ...
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  • AVARICIA, LA
    ZAMAGNI, STEFANO
    Este libro trata de la avaricia, pecado capital que raramente se manifiesta como tal. Con frecuencia adopta el aspecto de la avidez, de la codicia, del ansia, de la usura, de la concupiscencia, del hambre de riquezas, de la tacañería o de la mezquindad. A partir de lo molesto que resulta la avaricia de los otros, el avaro puede deducir lo que los demás sienten con respecto a él...
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  • IRA, LA
    BODEI, REMO
    La ira se expresa mediante rasgos somáticos y psíquicos que podemos observar fácilmente en nosotros mismos y en los demás. Siempre tiene un sabor amargo, comporta sufrimiento en el alma y, si es recurrente, hasta en el cuerpo, porque desemboca en úlcera o hipertensión. Siempre a nivel físico, presenta múltiples síntomas: agitación motora, aceleración del ritmo cardíaco, tensión...
    Disponible 24/48 horas

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