Mucha gente vive ese proceso con angustia; a veces, porque no saben qué camino elegir: ¿A o B? y, muchas otras, porque tienen intereses familiares, sociales, incluso "su otro yo" les dice que, si se lanza a lo que realmente les le apasiona, no les permitirá ganar el dinero suficiente para vivir en un mundo cada vez más competitivo, en el cual el desempleo es un problema muy grave en medio de una situación económica nacional y mundial sumamente difícil.
El autor relata con sencillez y realismo muchas situaciones en las que es preciso decidir bien el camino. Una vez decidido, es sólo entonces cuando se consigue un equilibrio entre lo que te apasiona y lo que realmente necesitas; entrégate a ello al 100%, no decaigas, tómate tu tiempo.