El proyecto más importante del III Reich dirigido por el general Hans Kammler llevó a los nazis al desarrollo de la ingeniería del tiempo para crear una máquina que viajara a Etiopía y obtener una poderosa reliquia, el Arca de la Alianza. Su misión, trasladarla a Normandía y evitar la invasión antes del famoso día D, denominada en clave, Operación Overlord.