La vida rota (1910) es la novela de Corpus Barga que más éxitos ha cosechado. Está protagonizada por una compleja y singular galería de personajes de un pueblo, que el autor llama Benalmena, pero que en realidad se corresponde con Belalcázar, localidad de Córdoba a la que estuvo muy vinculada la familia de Corpus Barga, y en la que él mismo había pasado muchas temporadas. Será Rafael, el personaje principal, el hilo conductor de la novela, de la que podrá extraerse una visión crítica de las luchas entre los caciques y de las desigualdades sociales de la vida del campo en la España de principios del XX. La obra fue un claro precedente de la descripción que poco tiempo después haría Baroja en El árbol de la ciencia al referirse al modo de vida de los habitantes de Alcolea del Campo.