Como Bolaño, Vila-Matas o Rodrigo Fresán, Bordón siente predilección por las historias que involucran a otros escritores; la propia exhortación incendiaria no es otra que una célebre frase de Gombrowitz.
Artículos relacionados
Vista previa: THE HORN. EL TRIBUTO DEFINITIVO DE LA GENERACION BEAT AL JAZZ
Utilizamos cookies propias y de terceros con fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Clica AQUÍ para más información. Puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón "Aceptar cookies" o configurarlas o rechazar su uso clicando "Denegar".