Presentamos este cuento con dos caminos para elegir, entretenimientos y una moraleja sobre la solidaridad. Los padres deberían leerlo junto a los niños. Cuando éstos tengan que optar por un camino, los padres les preguntarán cuál de los dos les gustaría elegir. Entonces, les leerán la situación que los niños eligieron. Ellos verán las posibles consecuencias de su propia decisión, tanto de la apropiada como de la inapropiada. Al terminar de leer, los padres podrían enseñar a los niños que la solidaridad es ser tolerantes y comprensivos con quienes nos rodean. Aun siendo jóvenes, los niños son capaces de ser personas solidarias. Compartir golosinas con amigos, ayudarlos con sus tareas y auxiliar a otras personas son ejemplos de solidaridad. Los padres podrán así fomentar en los niños la idea de ser personas solidarias en el futuro.